LICOR PAX
La Tercera República francesa (1870-1940) envió al exilio a los monjes normandos de la abadía de Fecamp,famosa por la creación del licor Bénédictine.Estos monjes recalaron en el monasterio de Samos (Lugo). En sus alforjas traían un gran secreto, la fórmula que daría origen al Licor Pax a comienzos de los años 30 y que durante décadas se elaboró en el cenobio y que alcanzó una gran fama en todo el mundo debido a que este monasterio lucense se encuentra en el Camino de Santiago y gracias a ello miles de peregrinos saborearon este brebaje.
Un incendio en 1951 que se sospecha que se inició en la destilería y asoló gran parte del cenobio hizo que el único monje que tenía la fórmula se negara a seguir destilándolo después de que muriese un joven novicio de 14 años que trabajaba en la destilería ese día.
Cuatro años después el prior descubrió una copia de aquella fórmula y volvió a elaborarse, en una fábrica a unos dos kilómetros del monasterio mientras éste se reconstruía, lo cual costó 9 años pues había quedado muy afectado el monasterio (solo se habían salvado las paredes y la iglesia).
En esta nueva fábrica no sólo se destilaría el licor Pax, también ginebra y brandy.La fabricación cesó a mediados de 1970, pero la fórmula fue pasando de prior a prior.
Ya en 2012 se inicia la creación de la Gran Despensa de Samos ( ubicada en el mismo lugar donde se encontraba la antigua destilería) y 3 años mas tarde aparecen las primeras botellas de licor Pax.Los responsables de la empresa disponían de dos recetas originales con pequeñas diferencias, la de Benito González que data de 1949 y del padre Jerónimo, cuya fecha se desconoce. Los responsables de la empresa no desvelaron por cual especialidad optaron y solo dijeron que eligieron la que les pareció más idónea.
Como curiosidad de este afamado licor encontramos unos versos o ripios atribuidos al Marques de Ugena:
Licor Pax, una receta secreta:
Como hemos dicho la receta sigue siendo un misterio, solo sabemos que se macera por un tiempo de 12 meses en barricas a base de orujo y una gran selección de hierbas recolectadas en los campos de Samos.En la actualidad no disponen de miniaturas, por lo que las que aparecen en nuestras colecciones datan posiblemente de la destilería posterior al incendio.Unas pequeñas joyas, desde luego: